Porsche 993 • 1993-1998
El modelo 993 constituyó todo un avance estético. No obstante, a pesar de sus formas más suaves y redondeadas, no dejaba de ser el 911 de siempre. El diseñador Harm Lagaay integró los parachoques en la armoniosa estructura con sumo acierto. Los aletines delanteros se inclinaban hacia el asfalto y los faros eran más oblicuos gracias la nueva tecnología de iluminación. Desde el parabrisas hasta el maletero, apenas se apreciaba que se trataba de una construcción del todo nueva. Así mismo, algunos elementos del diseño los anticipó el modelo 959, un vehículo que fue presentado en 1985 para el Grupo B.
Una de las grandes aportaciones del 993 fue la incorporación de un nuevo eje trasero denominado "multibrazo", que mejoró de manera notable la conducción del vehículo, permitiendo en gran medida un comportamiento neutro o ligeramente subvirador. Hablando de subviraje, hasta hacía muy poco, eso era impensable en un 911. Las continuas mejoras aplicadas al incombustible bóxer 3.6 litros lo llevo hasta los 272 CV, aumentados en 13 CV en la última revisión de 1995.
Por otro lado, el Carrera, que añadió a su nombre la S (1996), no ofrecía más potencia que los anteriores Carrera 4 y Carrera 2, pero las mejoras en los frenos lo hizo superior. Siguiendo con la tradición, también se presento un Porsche 911 993 RS. Con el bóxer llevado hasta los 3.8 litros, erogaba 300 CV, un monstruo capaz de alcanzar los 100 Km/h desde parado en tan solo 5,1 segundos.
Sin embargo, los mejores modelos del 993 fueron el Turbo, con 408 CV y el GT2. Eran gemelos, pero radicalmente distintos entre sí. Ambos montaban el bóxer 3.6 litros con doble turbo y doble intercooler, y un cambio de seis velocidades. El Porsche 911 993 Turbo transmitía su potencia al asfalto por medio de la tracción total, mientras que el Porsche 911 993 GT2 era un tracción trasera puro con 430 CV. Asi mismo, el Turbo incorporaba todo tipo de equipamiento, mientras que el GT2 llevaba lo imprescindible. El Turbo se convirtió en burgues, mientras el GT2 era una bestia esperando ser domada.
